Tossal, Fuente España y Saladella Larga
Ascendiendo por las faldas de la montaña del Tossal, zigzagueando a través del Camí de la Bola, llegamos al Corral de la Corona, donde el terreno planea y el camino se bifurca. Un ramal, sigue por la depresión, que poco después se configura, hasta el barranco de la Saladella Llarga. El otro, conduce a la Font d’Espanya –donde mana el agua albergada dentro de un antiguo refugio de obra- y continúa hasta enlazar con el barranco de Els Fontanars, para descender por la Escalerola y confluir finalmente también en la Saladella Llarga.
Siendo esta área la continuación hacia el Este de la zona descrita en el punto anterior, las características geológicas que presenta son muy similares, y aparecen, por ello, tanto materiales cretácicos como del keuper.
Esta zona es pródiga en surgencias de agua. A la ya referida Font d’Espanya se une la Font de Gocha, y aguas arriba del Barranc dels Fontanars, la Font de la Carrasca. Pero lo más significativo es que, ya en la Saladella Llarga, vuelve a aparecer el agua salada a poca distancia de otro manantial de agua dulce.
Efectivamente, la corriente de agua que discurre y se encharca a lo largo de este barranco, se nutre del concurso de dos manantiales: uno dulce, en la ladera Este, a los pies de La Penya, y, frente a éste, a corta distancia del mismo y en la parte opuesta del barranco, otro salado. El manantial dulce surge de las calizas de cretácico, y el salado, de los materiales yesíferos del triásico. De ahí el nombre de Saladella Llarga: fuente de aguasal situada a más larga distancia de la población que la otra Saladella .
Por lo que se refiere a la vegetación, es la típica de estas zonas montuosas, destacando los lentiscares, que son especialmente abundantes, así como algunos modroñales en ciertos puntos. En los barrancos húmedos del área todavía se conservan pinos de considerable tamaño, cubiertos por hiedra y otras especies trepadoras; y en los lugares de mayor humedad aparecen también comunidades edafófilas tipo adelfares.
La fauna es también la habitual, pero destacan algunos ejemplares de águila perdicera que nidifican por estos lares, lo que ya de por sí confiere un especial valor ecológico al área.
Desde el punto de vista paleontológico, merece destacarse un yacimiento de fósiles de ostras gigantes a ambos lados del camino de la Font d’Espanya; y desde la perspectiva arqueológica destaca el asentamiento de la Edad del Bronce situado sobre la cresta del Tossal.
A nivel paisajístico la zona presenta unas panorámicas excepcionales.
